10 RAZONES BASADAS EN LA BIBLIA PARA QUE LOS CRISTIANOS APOYEN A LOS HOMOSEXUALES

Matthew Vines, es un joven poco común con circunstancias normales. A sus 19 años descubrió que era gay, pero al definirse como un cristiano creyente en la Biblia supo que no estaba en una situación cómoda.

Mientras cursaba su 2do año como estudiante en Harvard abandonó la escuela para intentar reconciliar su orientación sexual con lo que la Biblia decía sobre la homosexualidad. Este por 4 años estudió la Biblia y lo que en ella se decía sobre el sexo entre personas del mismo sexo y sus relaciones. El resultado fue su libro titulado, "God and the Gay Christian". Vines llama al libro, "una carta abierta a los cristianos modernos", sobre por qué deben apoyar las relaciones entre el mismo sexo y lo que la Biblia dice realmente sobre la homosexualidad.

Según Vines, su mayor argumento es que, "los cristianos que afirman la total autoridad de la Biblia pueden también afirmar relaciones del mismo sexo comprometidas y monógamas."

En una entrevista, concedida a la revista Queerty, se le pidió que proveyera 10 razones, sustentadas en la Biblia, de por qué los cristianos debían apoyar las relaciones del mismo sexo. Esto fue lo que contestó:

Condenar las relaciones entre personas del mismo sexo es dañino para las personas LGBT. Según él, Jesús enseñó en el Sermón del Monte que buenos árboles proveen buenos frutos, pero el rechazó de las relaciones del mismo sexo por la iglesia ha causado gran sufrimiento innecesario a la comunidad LGBT.

La orientación sexual es un concepto nuevo, uno que la tradición cristiana no ha atendido. Muchos cristianos  buscan en la tradición de su fe para formar sus creencias, pero el concepto de orientación sexual es nuevo. La tradición cristiana no se ha expresado sobre el asunto moderno de los temas de las personas LGBT y sus relaciones.

El celibato es un obsequio  no un mandato. La Biblia honra el celibato como una buena forma de vida, Jesús fue célibe. Pero de igual manera hace claro que el celibato debe ser una decisión voluntaria hecha por aquellos que tienen el don de hacerlo. Requerir que todas las personas gay permanezcan célibes porque sus sexualidades son "dañadas" no está en consistencia con las enseñanzas de la Biblia sobre el tema.

Sodoma y Gomorra envolvió un intento de violación grupal, no una relación de amor. La destrucción de Sodoma y Gomorra se menciona de forma frecuente como el resultado de la ira de Dios contra la homosexualidad. Pero la única forma de sexo entre personas del mismo sexo que se describe en la historia es un intento de violación grupal, nada como una relación amorosa, llena de compromiso como se observan hoy día. La Biblia condena a Sodoma de forma explícita por su arrogancia, falta de hospitalidad y apatía hacía los pobres, pero nunca hacía las relaciones entre personas del mismo sexo.

La prohibición en Levítico no aplica a los cristianos. Levítico condena el sexo entre varones, pero el código de ley del Antiguo Testamento nunca aplicó a los cristianos a la luz de la muerte de Cristo. Levítico condena también el comer cerdo, conejo o crustáceos, cortar el cabello al lado de la cabeza de alguien, y tener sexo durante el periodo menstrual de una mujer; ninguna de las cuales continúan siendo observadas por los cristianos.

Pablo condenó la lujuria entre personas del mismo sexo, no el amor. Al igual que los escritores antiguos, Pablo describió la conducta sexual entre personas del mismo sexo como el resultado de un deseo sexual excesivo de parte de personas que pudiesen estar contentas con relaciones del sexo opuesto. El no conocía de relaciones amorosas, de largo tiempo. Y aunque describió las relaciones entre el mismo sexo como "no naturales", también dijo que los hombres que usaban el cabello largo iban en contra de la naturaleza.

El término "homosexual" no existía hasta el 1892. Algunas traducciones modernas de la biblia dicen que los "homosexuales" no heredaran el reino de Dios, pero ni el concepto ni la palabra para personas con atracción exclusiva hacía su mismo sexo existían hasta finales del siglo 19. Mientras que la biblia rechaza la conducta lujuriosa hacía el mismo sexo, eso no está cerca de condenar todas las relaciones de las personas gay.

El matrimonio es sobre compromiso. El matrimonio envuelve en ocasiones la procreación, pero de acuerdo al Nuevo Testamento, el mismo está basado en algo más profundo: una vida de compromiso con una pareja. El matrimonio es comparado con la relación entre Cristo y la iglesia, y mientras que el lenguaje usado es de sexos opuestos, los principios de base aplican de la misma forma a parejas del mismo sexo.

Los seres humanos necesitan relaciones. Desde el principio del génesis los humanos son descritos como teniendo necesidad de relacionarse. La sexualidad es una parte importante de lo que es ser una persona que se relaciona. Condenar la sexualidad de las personas LGBT daña su habilidad para estar en una relación con otras personas, y con Dios.

Los cristianos creyentes ya están abrazando a sus hermanos y hermanas LGBT. Desde denominaciones como la Iglesia Luterana, la Iglesia Presbiterana, hasta organizaciones como "Gay Christian Network" y "Reformation Project", los cristianos a lo ancho del país ya están apoyando compromisos para la equidad LGBT.