Según la Asociación Américana de Psicólogos un desorden mental es aquel que causa incomodidad e incapacidad de ejercer trabajos. Muchas personas transgéneros no experimentan estos síntomas, lo cual implica no identificarlo como un desroden mental.
Para estos individuos el problema significativo recae en encontrar los recursos necesarios para poder hacer su cirugía de recostrucción genital, encontrar servicios de consejería, terapia de hormonas, procesos médicos y acomodación social para minimizar el discrimen. Estos obstaculos si pueden llevar al individuo transgénero a incomodidad e incapacidad incluyendo ansiedad, depresión y desórdenes relacionados a un nivel más alto que una persona que no es transgénero.
En los Estados Unidos los servicios de salud por planes médicos, tales como Medicare o Medicaid, deben ser dirigidos a desórdenes que están en las listas de la International Classification of Diseases (ICD) o de la Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM-IV). De acuerdo con DSM-IV, las personas que experimentan de forma intensa y persistente la incongruencia de su sexo psicológico y su sexo físico pueden ser diagnosticados con el “gender identity disorder”.
Entre la comunidad trans este diagnóstico es muy controversial. Diferentes grupos pro trangénero y activistas dicen que es inapropiado patologizar la incongruencia de género y por tanto, segun estos grupo,s esta debe ser eliminado de las listas. Por otro lado otros argumentan que es esencial mantenerlo como un desroden mental ya que de esa forma se obtienen los beneficios necesarios, por parte de los proveedores de planes médicos.
Para estos individuos el problema significativo recae en encontrar los recursos necesarios para poder hacer su cirugía de recostrucción genital, encontrar servicios de consejería, terapia de hormonas, procesos médicos y acomodación social para minimizar el discrimen. Estos obstaculos si pueden llevar al individuo transgénero a incomodidad e incapacidad incluyendo ansiedad, depresión y desórdenes relacionados a un nivel más alto que una persona que no es transgénero.
En los Estados Unidos los servicios de salud por planes médicos, tales como Medicare o Medicaid, deben ser dirigidos a desórdenes que están en las listas de la International Classification of Diseases (ICD) o de la Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM-IV). De acuerdo con DSM-IV, las personas que experimentan de forma intensa y persistente la incongruencia de su sexo psicológico y su sexo físico pueden ser diagnosticados con el “gender identity disorder”.
Entre la comunidad trans este diagnóstico es muy controversial. Diferentes grupos pro trangénero y activistas dicen que es inapropiado patologizar la incongruencia de género y por tanto, segun estos grupo,s esta debe ser eliminado de las listas. Por otro lado otros argumentan que es esencial mantenerlo como un desroden mental ya que de esa forma se obtienen los beneficios necesarios, por parte de los proveedores de planes médicos.
Este artículo pertenece a la serie: TR@NS+GEN3R0: UNA NUEVA SERIE DE ARTICULOS
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¿SER TRANSGENERO ES UN DESORDEN MENTAL?
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