ACTIVISMO 101: ESA GENTE NO SON CRISTIANOS

Vivimos momentos históricos. Por primera vez una potencia mundial incluye dentro de su política exterior la defensa de los derechos LGBT. En palabras textuales de la secretaria de estados de E. U., Hilary Clinton, “Los derechos gay son derechos humanos, y los derechos humanos son derechos gay”.

El planteamiento filosófico no es complejo: la gente LGBT somos seres humanos y como tales tenemos el derecho a ser nosotros mismos y expresar lo que somos. Pero hay sectores en todo el mundo que no lo entiende así y lo resisten. Es precisamente por esto que es necesario defender esos derechos, porque hay personas e intereses que buscan negarlos.

Curiosamente, a nivel local, en Puerto Rico, sectores del gobierno se mueven en una dirección completamente opuesta. A espaldas del pueblo parecen negociar con sectores religiosos para quitar derechos ya adquiridos por las personas LGBT. Para el gobierno, específicamente la gerencia del senado, la agenda parece ser negociar derechos de grupos marginados para obtener endosos políticos de grupos conservadores. Se supone que los derechos no sean negociables; pero de los políticos nada nos sorprende. Para los sectores religiosos la agenda parece ser prometer endosos políticos a cambio de concesiones. Si es así, estos llamados representantes religiosos no tendrían creencias firmes, solo intereses; las creencias no son negociables. Entonces no serían cristianos, solo simples mercaderes.

El planteamiento de la administración del Presidente Obama es trascendental. Replantea todo el asunto y le concede humanidad a los sectores LGBT. Humanidad negada por los sectores opositores. A los sectores LGBT se les niega su humanidad y sus derechos definiéndolos como demoniacos, confundidos o torcidos. En el proceso se le priva al sujeto de tomar sus propias decisiones, y se le intenta “corregir” a la fuerza. Un proceso similar aconteció cuando se dilucidaba si los negros merecían derechos. A los negros se les privaba de derechos argumentando que no eran humanos. De igual manera, a los sectores LGBT no se les conceden derechos recurriendo al argumento de que están errados, confundidos o simplemente enfermos. Es una manera de negar que seamos humanos completos y capaces.

Pero no estamos errados, y ¡Sí somos humanos! Queremos creer que los opositores se cimientan en creencias honestas, pero no descartamos que haya también simples especuladores que se esconden detrás de una cruz para obtener ganancias políticas y económicas. Estos opositores no pueden entender o no quieren entender que lo humano evoluciona, explora nuevas formas de manifestarse y surgen nuevas variaciones. Es un proceso natural de la vida, moverse a otras cosas, explorar nuevas expresiones.

La lucha por los derechos LGBT no es una lucha por privilegios. En el mundo entero personas LGBT son golpeadas, torturadas, hostigadas y hasta asesinadas por ser lo que son. A nivel de Puerto Rico en los pasados 5 años al menos 30 personas LGBT han sido asesinadas. ¿Cuántos cristianos han sido asesinados en PR en los pasados 5 años por ser cristianos? Sin embargo, lo más absurdo es que los sectores más militantes en la negación de los derechos LGBT dicen inspirarse en las escrituras de un ser cuya lucha fue precisamente para defender los derechos de los marginados. En su deambular por la tierra, este ser llamado Jesús luchó e inclusive se sacrificó defendiendo los derechos de quienes eran marginados, esclavizados y asesinados. Por eso planteamos que esa gente que insisten en negar los derechos no son cristianos. En el mejor de los casos pudiesen estar confundidos, y en el peor de los casos, simplemente ser mezquinos escondidos detrás de la cruz buscando poder y dinero.

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